jueves, 29 de marzo de 2007

DE ROJO Y NEGRO


El día de hoy se tiñe de rojo, rojo con R de rabia;
de negro, negro con N de impotencia...
Hace ya tiempo quedó desterrado de la paleta
el blanco de la esperanza.
Hoy entiendo todo, y no me atrevo a hacer nada.
Mi hígado o mi corazón en cualquier momento dirán "basta",
y mi vida confusa, cobarde y mentirosa
hallará al fin sosiego en el piadoso regazo de la muerte.
Ya no sé gritar al viento, soy una aguja en un pajar.
Vueltas y más vueltas, un círculo maldito.
Y sin valor para aplastarlo...
El alma consumida en frías llamas.

Mi revolución ha sido un fracaso,
solo mi sangre alimenta las trincheras.
Mi sangre, mi dolor y la soledad.
Más rojo, más negro, más fuego en el alma...
Polvo, escombros, humo...

Estoy solo en mi locura diaria,
y no hay compañero que muera conmigo... No lo hay.
Únicamente vacíos silencios de muerte,
de una muerte lánguida, interior,
que no me mata sino que me muere lentamente
en este decorado falso de mi vida.

Hoy he llorado y mis lágrimas no han llegado al paraíso.
La puerta estaba cerrada y había un cartel
que decía: CERRADO POR ABURRIMIENTO.
También ahí arriba, como aquí abajo,
aburridos de las mentiras diarias,
cansados de no gritar la verdad
de esconder la cabeza como un avestruz.
Y yo no doy para más.
Dame un arma, un campo de batalla y mi pensamiento,
y no lo dudes: moriría por ti.

ETINARCADIA

14 comentarios:

yraya dijo...

uufff, que palabras y soledades más tristes, me han dado que pensar.

saludos

SCD dijo...

¡Vaya!, que rabia, que manera tan fuerte de expresarte.
No queda lugar a dudas, cierto, morirías en el campo de batalla.
Saludos!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Misántropo dijo...

Mi querido Brel se quejaba de que le habían robado el Far West, como algo irrecuperable. Pero luego, mira; no paró de dejarse los piños hasta que palmó.

Pues no hay calles que barrer, quimera, para ese tí; y para tí.

Un poco desgarrador hoy ¿eh?

Abrazos.

poca luz dijo...

...hambre de guerra.

De esa guerra necesaria en la que sólo pelean los de verdad.

Genial.

Calle Quimera dijo...

Bienvenida a esta Calle, Yraya, gracias por tu visita. Es un placer.

Saludos.

Calle Quimera dijo...

En cada campo de batalla que se pisa se muere un poco, SCD. Y a veces sacar de dentro la rabia restituye un poco de esa vida que se nos escapa en la lucha.

Saludos cordiales.

Calle Quimera dijo...

Sí que es cierto, Misántropo, pelín desgarrador sí que es el poema. Hay días, ya sabes... Algún piño habré perdido en el camino, y más de una escoba habré gastado barriendo calles, pero aún me quedan muchos piños y muchas escobas para continuar. Siempre adelante.

Un abrazo.

Calle Quimera dijo...

Guerra necesaria, Nada, tú los has dicho. Pero a veces tan agotadora... Sin embargo, siempre en la brecha, esperando ganarla al fin.

Gracias por tus palabras y por tu visita. Saludos.

Moony-A media luz dijo...

Nó... no mueras por mí, jamás
ni esperes paraísos abiertos
más allá de los que tú construyas,
estámpate contra el suelo, sí,
que verás a los buitres de la ignorancia volar sobre ti
y ya no podrás hacer nada,
déjate perder en los silencios
que cuando quieras gritar
la voz se quebrará en tu garganta,
olvídate de quien eres, de quien fuíste,
que nadie te recordará.
Nó, amigo, por mí no mueras,
no quiero ser la disculpa de tu suicidio,
porque no tengo nada para darte, ni armas, ni trincheras,
tan sólo tu pensamiento me basta para cantar.
Ves... yo canto con tus lágrimas,
porque me demuestran que estás vivo.

AnaR dijo...

En un momento dado todos llegamos a ser idealistas corrompidos. Hasta que resurgimos...

Inmenso texto.Un aplauso

Besos

Calle Quimera dijo...

Paraísos abiertos... ¿Quién no los anhela? Siempre esperaré paraísos abiertos más allá de los construidos por mí, son mi quimera particular. Quiero creer que derribarán muros de oscuridad para que entre poco a poco la Luz y que serán, con los míos, las llaves del Universo.

Hay silencios que son importantes, necesarios para mí. En ellos me encuentro, y el gritar libre en mi interior aleja, temerosos, a los buitres de la ignorancia. Al menos, en ello confío...

Siempre he sido, Moony, de veras, me recuerden o no.

En mi realidad no existe el suicidio como solución a nada, ni siquiera en mis pensamientos llega a ser físico... Solo tiene cabida en la palabra, en la metáfora.

Quédate con mis pensamientos, amiga. Tal vez las armas, trincheras y compañeros que busco solo sean palabras como las tuyas y las de otros que me alimentan en la batalla.

Sí, estoy vivo y morir por ti, por otros como tú, tal vez fuera vivir en ti, en ellos.

Un abrazo enorme y léeme siempre que quieras con el corazón, como siempre haces. Te espero...siempre.

Calle Quimera dijo...

Mientras quede un hálito de idealismo sin corromper, resurgiremos, Ana R.

Gracias por ese aplauso; nunca pensé que uno recibido desde el otro lado de la pantalla pudiera llegarme tanto. Un beso para ti también.

Anónimo dijo...

El arma ya la tienes, la palabra.
El campo ya lo tienes, una pantalla o una hoja en blanco.
La sangre ya la tienes en el corazón que no para.
Morir, siempre estás muriendo y naciendo de cada muerte.

Calle Quimera dijo...

Hago mías tus palabras, Miguel.

Morir y nacer para repetir el ciclo... Es la esencia de la vida.

Abrazos.